Derrotas de Sheinbaum / Maullidos Urbanos
Gato de Barrio /
- “Es una decisión del Senado la que se tomó ayer. Y hasta ahí.” dijo la presidenta.
La reelección de Rosario Piedra al frente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), tiene varias lecturas, nada positivas para la presidenta Claudia Sheinbaum.
Primero, pese a haber respaldado a Nashieli Ramírez Hernández, la Ombudsperson en la Ciudad de México y la mejor evaluada entre los quince finalistas, senadores de Morena y aliados eligieron a Piedra Ibarra, la ubicada en el último sitio debido y quien, además fue metida a fuerza en la terna final al marginar a Tania Ramírez, la segunda mejor evaluada, sin omitir que entregó una carta de apoyo falsa, hecho que la mayoría oficialista buscó restarle importancia.
Por esta situación se interpretaría que Sheinbaum podrá ser la presidenta, pero no detenta ni ejerce el poder que debería tener como mandataria ya que, en este caso, los senadores la ignoraron para acatar lo dispuesto por el llamado “Fantasma de Palenque”, es decir Andrés Manuel López Obrador, el verdadero líder de la llamada cuarta transformación.
Durante la sesión en el Senado, la cual se prolongó por horas con varios recesos y enfrentamientos entre legisladores oficialistas y opositores, y tras la manipulación por parte de Adán Augusto López, coordinador de la fracción de Morena, para controlar a los posibles inconformes, finalmente Piedra recibió 87 votos –suficientes para la mayoría calificada necesaria–, Ramírez Hernández 36, Paulina Hernández Diz uno y otros tres fueron anulados.
Otra lectura es que pese a las constantes reiteraciones de los morenistas de asegurar que ellos son diferentes eso resulta cierto, pero la realidad resultaron peores que priistas, panistas y perredistas, ya que para concretar la reelección de Piedra Ibarra incurrieron en las citadas situaciones inéditas, como admitir la carta apócrifa, incluirla en una terna en la cual no tenía derecho de participar y, literalmente, forzar a sus senadores a votar a su favor.
Un punto negativo para Sheinbaum es que ella ha impulsado la no reelección en los cargos públicos, incluso alienta una iniciativa de ley para aplicarlo a legisladores locales y federales así como alcaldes, pero ahora, en el caso de la CNDH, ese discurso quedó anulado.
La mejor muestra del malestar de Sheinbaum por la reelección de Piedra fue en la mañanera, donde al ser cuestionada y sin expresar algún reconocimiento o felicitación, con gesto duro se limitó a expresar: “Es una decisión del Senado la que se tomó ayer. Y hasta ahí.”
Ahora Rosario Piedra, la peor presidenta de la CNDH en sus 34 años de existencia, podrá seguir con sus acciones en perjuicio quienes quedarán indefensos ante abusos, omisiones y violaciones de derechos por parte del Estado mexicano.