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Sheinbaum y la realidad / Maullidos Urbanos

Gato de Barrio /

gatodebarrio@yahoo.com.mx /

Durante su gira proselitista por Chiapas el pasado fin de semana Claudia Sheinbaum, candidata de Morena a la presidencia de la república, se enfrentó a una realidad que niegan conocer tanto ella como Andrés Manuel López Obrador. pero la padecen constantemente miles de mexicanos en diferentes puntos del país.

El sábado durante un mitin en Chilón, les cuestionó a los asistentes sobre cómo se encuentran los centros de salud en la región y la inmediata respuesta fue “¡mal!”; después les preguntó si requerían “médicos, enfermeras y medicamentos”, y su tono alegre cambió a uno serio, cuando la respuesta de los presentes era que faltaba “todo”.

De esta forma se desmienten las insistentes versiones de que el gobierno federal ha cumplido con la cobertura médica gratuita para todos, comprendiendo tanto la atención médica como la entrega de medicamentos. Sin duda fue un inicial enfrentamiento con la realidad.

El domingo, al viajar de Comitán a Motozintla, Sheinbaum fue detenida en un retén por encapuchados, según unos eran miembros de un grupo de autodefensas, para otros –como la diputada morenista Patricia Arizmendi, acompañante de la candidata–, integrantes de un grupo criminal, presuntamente del Cártel de Sinaloa, quienes le solicitaron, en tono amable y respetuoso, que al llegar al poder no se olvidara de ellos y terminara con la violencia cotidiana.

Durante el diálogo la candidata permaneció en el asiento del copiloto de su vehículo, y sólo asentía con la cabeza. Incluso, saludo de mano a uno de ellos. En el video difundido en redes sociales también se aprecia un micrófono del medio LatinUs. Después Sheinbaum negó rotundamente que llevaran armas y descartó que fueran miembros del Cártel de Sinaloa, quien disputa el territorio chiapaneco al Cártel Jalisco Nueva Generación.

En su mañanera, López Obrador calificó de montaje la instalación de ese retén. Dijo: “Ya cuando pasan esas cosas, ya sabemos que es muy probable que sea propaganda, porque el que va a hacer un planteamiento ni va encapuchado ni está grabando”. Además, cuestionó la presencia de una grabadora con el sello de LatinUs.

Aunque periodistas le explicaron que a los reporteros se les impidió bajar de la unidad del convoy oficial, los de otros medios viajan en sus autos, razón por la cual el periodista de LatinUs logró estar presente en el diálogo entre encapuchados y la candidata.

Más allá de especulaciones existe un punto sin considerar: ¿qué pasó con la seguridad que debía tener Sheinbaum por parte de la Guardia Nacional y del Ejército? Porque si los encapuchados, sean autodefensas o criminales, pudieron detener al convoy de la morenista, es que no contaba con ese cuidado.

Pero la existencia de retenes no es inusual no solo en Chiapas sino en otros estados donde domina el crimen organizado y el pasar por uno de ellos –afortunadamente sin mayores consecuencias–,para Sheinbaum resultó ser otro encontronazo con la realidad, donde se ratifica que la política de “abrazos, no balazos”, se confirma como otra frase vacía.

La falta de medicinas, de servicios de salud y el control territorial de los grupos criminales son hechos cotidianos para muchos mexicanos, quienes viven en una realidad muy distinta a la que se pinta diariamente desde Palacio Nacional en las mañaneras.

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