"TODO EDUCADOR DEBE PROMOVER UNA EDUCACIÓN PARA LA PAZ", PLANTEAN COLABORADORES DE "CONVERGENCIA"

• Lo anterior, a través de formas pacíficas y en contextos sensibles, siempre comprometido con los valores de una cultura de paz, reduciendo primero y eliminando después, cualquier forma de violencia.

La educación en la paz implica que la forma de enseñar o aprender debe ser pacífica en sí misma y en consecuencia, coherente con lo que se persigue, señalaron los colaboradores de Convergencia, revista de Ciencias Sociales editada por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de México, Alfonso Fernández Herrería y María del Carmen López López.

            Lo autores de la investigación titulada “Educar para la paz. Necesidad de un cambio epistemológico” enfatizaron la importancia de que no exista contradicción entre el fin, que son los valores de paz, y los medios para conseguir dicho fin; opinaron que si se busca educar en la paz, todos los procesos, procedimientos, medios, contextos y ambientes de aprendizaje deben ser pacíficos.

            De otro lado, puntualizaron, se estarían enseñando o aprendiendo contenidos en ambientes y con procedimientos violentos; lo cual, además de contradictorio, coadyuvaría a perpetuar el aprendizaje implícito de la propia violencia.

            Alfonso Fernández Herrería y María del Carmen López López aseveraron que más allá de los contenidos que presenta un docente, todo educador debe promover una educación en la paz, con formas pacíficas y en contextos sensibles, siempre comprometido con los valores de una cultura de paz, reduciendo primero y eliminando después, cualquier forma de violencia.

            Aseguraron que todo profesor promueve consciente e inconscientemente educación en la paz o en la violencia, en función del tipo de prácticas implícitas y explícitas que desarrolla en un contexto determinado, a través de su actividad profesional.