REALIZA LA FACULTAD DE MEDICINA EL 5° CURSO DE INMUNOLOGÍA
- Tiene como propósito reforzar y actualizar los conocimientos de los asistentes en diversas áreas de la salud.
Alrededor de 250 especialistas, quienes fortalecerán sus conocimientos para desempeñarse de manera comprometida y competente en el sector salud, participan en el 5º Curso de Inmunología. “De lo molecular a la Clínica”, que se lleva a cabo en la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma del Estado de México.
Al encabezar la ceremonia inaugural del curso, la directora de la Facultad, Lilia Patricia Bustamante Montes, destacó que en su quinta edición, este proyecto tiene como propósito reforzar y actualizar los conocimientos de los asistentes en diversas áreas de la salud.
Acompañada por el subdirector académico, Miguel Ángel Karam Calderón, y la subdirectora administrativa, Guadalupe Ibarra Olvera, la directora enfatizó que en este marco se abordará la Inmunología: sus conceptos, componentes y aspectos, así como el sistema inmunológico del tejido no linfoide, la respuesta inmunológica adaptativa, tolerancia del sistema y alteraciones del mismo.
Bustamante Montes puntualizó que además de temas básicos, se abordarán aquellos relacionados con la clínica, la respuesta inmunológica a parásitos y plaguicidas, aspectos de Reumatología, aspectos más relevantes de problemas que son prioritarios para la entidad y el país, como el cáncer y la obesidad.
La directiva recalcó la importancia de la Inmunología, ya que no hay una especialidad médica que no involucre procesos inmunológicos; de ahí la importancia de que el personal de salud esté involucrado, refresque sus conocimientos y sepa qué hacen otros especialistas.
La investigadora de la Facultad de Medicina e integrante del Cuerpo Académico de Neurociencias, Irazú Contreras García, subrayó la importancia de contar con investigadores trabajando en el tema, lo cual ha permitido tomar medidas de prevención y tratamiento para estos padecimientos.
El sistema inmunológico depende mucho de las actividades y el estado nutricional; por ejemplo, el estrés pudiera ser detonante para que el sistema inmunológico baje su actividad y desarrolle ese tipo de problemas, sin descartar la carga genética, concluyó.