La historia en libros escolares / Maullidos Urbanos
M
Gato de Barrio
En los libros de texto de historia entregados a los alumnos de 16 a 18 años, se presenta una visión muy acorde a los intereses del presidente, ya que no solo justifica en su favor una serie de hechos históricos, también presenta situaciones presentes acordes con sus intereses para ubicarse como el político que requiere su país a fin de colocarse al nivel de héroe de la patria.
Pero eso sucede lejos de México, es en Rusia, donde los libros que se entregan este mes en las escuelas reflejan la visión histórica de Vladimir Putin: orgullo por los logros de la Unión Soviética, indignación por las humillaciones del colapso soviético y aclamación por el renacimiento de Rusia bajo el gobierno del exespía de la KGB, iniciado el último día de 1999.
Por ejemplo, el final del capítulo titulado la “Historia de Rusia de 1945 al comienzo del siglo XXI”, se centra en las causas de la guerra de Ucrania, el mayor conflicto terrestre en Europa desde la Segunda Guerra Mundial, con un saldo de varios cientos de miles de soldados heridos o muertos, en la parte denominada “Rusia hoy: La operación militar especial”, donde se refleja la desilusión de Putin con Occidente tras ofrecer el apoyo de su país a Estados Unidos durante los ataques del 11 de septiembre, en un “gesto de amistad” posterior a la Guerra Fría.
Se dice: “Occidente se obsesionó con desestabilizar la situación dentro de Rusia”. Agrega: “El objetivo ni siquiera estaba oculto: desmembrar a Rusia y obtener el control sobre sus recursos”, lo cual la juventud de Rusia así debe entender la tragedia del colapso soviético, la perfidia de Occidente y la necesidad de sacrificarse por la grandeza de la patria rusa.
Sucede que Putin –quien acumula más años al frente del Kremlin desde José Stalin–, ha luchado con los fantasmas de la historia rusa, ya sea lamentando el silencio de Moscú en el colapso de la Unión Soviética o defendiendo la “unidad histórica de rusos y ucranianos”, en un ensayo de casi siete mil palabras ocho meses antes de ordenar a sus tropas invadir a Ucrania.
Por supuesto desde líderes occidentales, disidentes rusos y hasta historiadores de esa nación, rechazan tal interpretación, incluso califican ese conflicto bélico como un error estratégico que expone las debilidades de Rusia. Así, Mikhail Kopitsa, destacado profesor de historia que abandonó Rusia tras la invasión de Ucrania, y ahora imparte clases en Montenegro así resume su opinión sobre esos libros: “Esto es propaganda, no es un libro de texto”.
Lamentablemente, el propósito de Putin no es solo justificar su gobierno y sus acciones, al pretender adecuar la historia a sus propósitos políticos y personales, sin embargo es de esperar que el juicio de la Historia lo ubique en el verdadero sitio que se merece: la basura,