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Maullidos Urbanos / Propiedad de los monumentos históricos

Gato de Barrio  /                        

gatodebarrio@yahoo.com.mx /

A pesar de que la Columna de la Independencia, popularmente conocido como Ángel de la Independencia, es un monumento claramente identificado con expresidente Porfirio Díaz, figura de la historia mexicana siempre denostada por la izquierda mexicana, ha sido utilizada por gobiernos de la Ciudad de México –supuestamente identificados con esa corriente ideológica– como un símbolo o logotipo de esas autoridades.

Al estar ubicada en Paseo de la Reforma, una de las principales avenidas capitalinas, también ha sido un sitio preferido por políticos, para iniciar o cerrar campañas proselitistas, para celebrar triunfos deportivos, en particular de la selección mexicana de futbol, sin omitir verbenas populares de fin de año y conciertos populares gratuitos, entre otros eventos públicos.

Incluso, el Instituto Nacional de Antropología e Historia es la entidad responsable de cuidar que la imagen de este monumento no sea explotada comercialmente de forma ilegal.

Pero ahora resulta que su administración –digamos, su propiedad moral–, la disputan los tres niveles de gobierno: alcaldía Cuauhtémoc, Ciudad de México y Federación, situación que nunca antes se había presentado debido a que todas ellas pertenecían a la misma corriente política: hace mucho, el PRI, posteriormente el PRD y más recientemente Morena.

Sucede que la alcaldesa Sandra Cuevas llegó a ese puesto postulada por la alianza opositora integrada por PAN, PRI y PRD, para romper con la larga historia de que un miembro del partido mayoritario en el poder ocupara ese cargo, ya fuera como delegado administrativo y ahora baja la figura de alcaldía.

Si bien inicialmente la disputa por el Ángel de la Independencia era entre la alcaldía y el gobierno capitalino, ahora se suma el gobierno Federal porque la Consejería Jurídica de la Presidencia interpuso un recurso de reclamación en la Suprema Corte de Justicia de la Nación contra la decisión de un ministro por haber admitido a trámite la controversia constitucional, promovida por Cuevas, actualmente alcalde con licencia.

Antes, el gobierno de la Ciudad de México que encabeza Martí Batres, también interpuso otro recurso de reclamación contra la decisión del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, por conceder una suspensión a la alcaldesa, para permitirle a su administración cuidar, mantener y preservar el monumento.

Sobre el recurso interpuesto por la Consejería Jurídica de Presidencia, fue turnado y admitido a trámite por la ministra Yasmín Esquivel Mossa, quien en las próximas semanas deberá presentar un proyecto, mientras el recurso del gobierno de la Ciudad de México fue admitido a trámite por la ministra Margarita Ríos Farjat.

En fin todo un lío por una laguna legal acerca de un monumento histórico y, cuyos resultados, podrían incidir en el futuro en este tipo de sitios, los cuales sencillamente deben ser considerados como propiedad del pueblo mexicano, y solamente la autoridad a quien se le asigne su cuidado, deberá dedicarse a eso: administrar su buen estado, sin ser objeto de una disputa partidista.

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